La Artista Juana Gómez propone una fusión de formas humanas y naturales para enfrentar la catástrofe. Luego de tres años de investigación, la reconocida artista nacional vuelve con una gran muestra individual.
La segunda piel, emplea el bordado, la cerámica, la instalación y el dibujo para proponer una fusión de formas naturales y humanas, como mecanismo para enfrentar la catástrofe.
“La piel cumple una doble función: nos une y nos separa del mundo. En el momento que atravesamos como especie, donde la tecnología y la naturaleza parecen ser antagónicas e incompatibles, creo que es urgente ensayar formas de fusión como un camino hacia adelante”, explicó Juana Gómez.